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Reglas de SEGURIDAD EN EL LABORATORIO

Conociendo el laboratorio

En este artículo, hablaremos de la seguridad en el laboratorio.

El laboratorio es el lugar donde se realizan los experimentos de física, química y biología. Para ello, está equipado con diferentes sustancias e instrumentos. Muchas sustancias pueden ser muy pelogrosas en menor o mayor medida, en especial cuando son manipuladas con descuido o por desconocimiento de sus características. Es importante tener ciertos cuidados y conocer las normas de seguridad de todo laboratorio, así como los símbolos que expresan los carteles colocados en el establecimiento o en los envases de los productos.

Para ello, ENSAMBLEDEIDEAS te trae 10 normas de seguridad en el laboratorio que debes tener siempre en cuenta. ¿Conocías algunos de ellos?

Seguridad en el Laboratorio.
Un laboratorio debe siempre contar con estas medidas a la vista de todos. ¡Chequea que el tuyo disponga de estas medidas!

Medidas de seguridad en el laboratorio

1. Es muy importante que lleves el pelo atado si lo tienes largo, sin bufandas o accesorios que cuelguen y puedan ser un peligro. Ten en cuenta que puedes quemarte o volcar recipientes. En cuanto a tu vestimenta, es recomendable que tengas la indumentaria adecuada (guardapolvos, guantes de látex, zapatos cerrados, pantalones largos, anteojos…).

2. El lugar de trabajo debe estar ordenado, limpio y prolijo. El orden es fundamental. Cada grupo de trabajo es responsable de sus materiales y su sector de trabajo.

3. Para manipular productos químicos o cambiarlos de recipiente debes usar espatulas, pinzas o pipetas. Las pipetas requieren de peritas extractoras adecuadas.

4. Para trasladar recipientes que se encuentren calientes y que, por lo tanto, representen un peligro, debes utilizar pinzas o agarraderas.

5. Nunca te olvides de etiquetar o rotular correctamente los reactivos que uses.

No bajes la guardia. ¡Vamos por más medidas de seguridad en el laboratorio!

6. Antes de encender el mechero, comprueba que no existan líquidos o materiales que puedan prenderse fuego fácilmente alrededor.

7. Si vas a realizar experimentos que que pueden emitir gases tóxicos o nocivos, hazlos bajo campanas extractoras.

8. Las sustancias ácidas y básicas deben ser manejados con mucha precaución. La posibilidad de que produzcan quemaduras o que sean muy corrosivas es muy alta en este tipo de sustancias. Ten cuidado al guardarlas: deben estar alejadas de productos inflamables. Es un detalle menor que puede evitar muchos accidentes.

9. Si hay que diluir con agua un ácido o una base, asegúrate de que sean estas sustancias las que se añadan al agua.

10. Al terminar la experiencia, lava el material utilizado, guarda el material prestando atención y deja las mesadas del laboratorio limpias y ordenadas.

11. Cuando estés calentando un tubo de ensayo, no lo apuntes directamente a tus ojos o rostro.

12. No huelas los productos químicos, muchos de ellos pueden ser muy peligrosos para tus vías respiratorias.

11. ¡Y lo más importante es no comer y no beber en el laboratorio!


Un consejo extra: al entrar, chequea la ubicación de los matafuegos (extintores de incendio), salidas de emergencia y -si tu laboratorio lo presenta-, la ducha de seguridad para el cuerpo y los ojos.

Para tener en cuenta

Para completar y mejorar las medidas de seguridad en el laboratorio, deberías tener en cuenta:

  1. Capacitación y Conocimiento: Asegúrate de que todo el personal y los estudiantes reciban capacitación adecuada sobre las prácticas de seguridad y el uso de equipos antes de comenzar a trabajar en el laboratorio.
  2. Equipo de Protección Personal (EPP): Además de los elementos mencionados (batas de laboratorio, guantes de látex, zapatos cerrados, pantalones largos, gafas de seguridad), considera el uso de mascarillas o respiradores si se manejan sustancias que pueden ser inhaladas y causar daño.
  3. Protocolo de Emergencia: Establece y familiariza a todos con los procedimientos de emergencia, incluyendo la ubicación y uso de los extintores, duchas de emergencia, y lavaojos. Asegúrate de que las salidas de emergencia estén claramente señalizadas y sean accesibles.
  4. Sistemas de Ventilación: Asegúrate de que el laboratorio esté bien ventilado y que se utilicen campanas extractoras no solo para gases tóxicos, sino también para la manipulación de sustancias volátiles.
  5. Inventario y Fichas de Seguridad: Mantén un inventario actualizado de todos los productos químicos y asegúrate de que las fichas de datos de seguridad (FDS) estén disponibles y accesibles para todos.
  6. Control de Derrames: Proporciona kits para el control de derrames y asegura que todos sepan cómo usarlos en caso de emergencia. Estos kits deben contener materiales absorbentes, neutralizantes y equipos de protección.
  7. Revisiones Regulares: Realiza inspecciones periódicas del laboratorio para identificar y corregir posibles riesgos. Asegúrate de que todos los equipos estén en buen estado de funcionamiento.
  8. Seguridad Eléctrica: Asegúrate de que todos los equipos eléctricos estén en buen estado y que no haya cables sueltos o dañados. Utiliza regletas con protección contra sobrecargas y evita el uso excesivo de enchufes múltiples.
  9. Normas de Comportamiento: Refuerza la importancia de comportarse de manera responsable y profesional en el laboratorio. Esto incluye no correr, jugar o hacer bromas que puedan distraer a otros y causar accidentes.
  10. Rotulado Claro: Además de etiquetar los reactivos, asegúrate de que todos los equipos y áreas de trabajo estén claramente rotulados, especialmente aquellos que implican riesgos específicos (por ejemplo, áreas de alto voltaje, materiales biológicos peligrosos).

Implementando estas medidas adicionales, se puede mejorar significativamente la seguridad en el laboratorio, reduciendo el riesgo de accidentes y promoviendo un ambiente de trabajo seguro y profesional.

Mesografía Sugerida

El portal de la Organización Mundial de la Salud ha emitido un Manual de Bioseguridad en el Laboratorio. ¡Recomendamos ampliamente su consulta! Disponible en https://www.who.int/topics/medical_waste/manual_bioseguridad_laboratorio.pdf

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Sin el efecto invernadero, la temperatura del planeta sería unos 33°C más baja.
el efecto invernadero
El efecto invernadero

El efecto invernadero

El efecto invernadero es un proceso natural por el cual ciertos gases de nuestra atmósfera captan parte del calor que la Tierra reenvía al espacio, luego de que el planeta se haya calentado por la radiación del Sol. De esta forma, se evita que la energía solar que la Tierra recibe constantemente vuelva inmediatamente al espacio. Como consecuencia, el planeta tiene una temperatura apta para la existencia de vida (no se encuentra ni muy frío ni muy caliente, a una temperatura promedio de unos 15°C aproximadamente).

Sin el efecto invernadero, la temperatura del planeta sería unos 33°C más baja.

Como ves, el efecto invernadero es completamente natural. El problema apareció cuando, por acción del hombre a partir de la Revolución Industrial a mediados del siglo XVIII, aumentó la concentración de estos gases en la atmósfera, causando el famoso calentamiento global.

Este fenómeno natural ocurre en la atmósfera de la Tierra, donde ciertos gases, como el dióxido de carbono, el metano y el vapor de agua, retienen el calor del sol y mantienen la temperatura del planeta en niveles adecuados para la vida. Sin embargo, en las últimas décadas, la actividad humana ha aumentado la cantidad de estos gases en la atmósfera, lo que ha provocado un aumento en la temperatura global, conocido como cambio climático.

La principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero son la quema de combustibles fósiles, como el petróleo, el gas y el carbón, para la generación de energía y la producción de bienes y servicios. Además, la deforestación y otros cambios en el uso del suelo también pueden contribuir a la emisión de gases de efecto invernadero.

El calentamiento global

El cambio climático y el calentamiento global tienen consecuencias graves para el medio ambiente y la vida en el planeta. Estos incluyen el aumento del nivel del mar, la alteración de los patrones de lluvia y la desertificación, el derretimiento de los glaciares y los casquetes polares, y la acidificación de los océanos. Además, el cambio climático también puede tener efectos negativos en la salud humana, la economía y la seguridad alimentaria.

Para abordar el problema del cambio climático, se han propuesto medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y limitar el aumento de la temperatura global. Estas medidas incluyen la adopción de tecnologías más limpias y eficientes en energía, el fomento de la energía renovable, la mejora de la eficiencia energética, la promoción del transporte sostenible y la reducción de la deforestación y la degradación del suelo. Además, también se han desarrollado acuerdos internacionales, como el Acuerdo de París, para establecer objetivos de reducción de emisiones y coordinar esfuerzos a nivel mundial para abordar el cambio climático.

En conclusión, el efecto invernadero es un fenómeno natural que es esencial para mantener la vida en la Tierra, pero la actividad humana ha alterado su equilibrio natural y ha provocado un aumento en la temperatura global y el cambio climático. Es importante tomar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y limitar los impactos del cambio climático en el medio ambiente y la sociedad.

¿Cuál es la relación entre el efecto invernadero y la capa de ozono?

La relación entre el efecto invernadero y la capa de ozono radica en el hecho de que algunos de los gases que contribuyen al efecto invernadero, como los clorofluorocarbonos (CFC) y los hidroclorofluorocarbonos (HCFC), también tienen un impacto negativo en la capa de ozono. Estos compuestos son liberados en la atmósfera por actividades humanas, como el uso de aerosoles, refrigerantes y disolventes industriales. Una vez en la atmósfera, los CFC y HCFC pueden migrar hacia la estratosfera, donde son descompuestos por la radiación ultravioleta liberando átomos de cloro y bromo. Estos átomos de cloro y bromo reaccionan con las moléculas de ozono, destruyéndolas y reduciendo así la cantidad de ozono en la capa protectora.

El efecto invernadero y la capa de ozono son dos fenómenos diferentes pero relacionados que ocurren en la atmósfera de la Tierra.

El efecto invernadero se refiere al proceso natural por el cual ciertos gases presentes en la atmósfera retienen parte del calor emitido por la Tierra. Estos gases, como el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O), actúan como una especie de “manta” que permite que la energía solar llegue a la superficie de la Tierra, pero dificulta su escape, lo que resulta en un aumento de la temperatura global. Este fenómeno es esencial para mantener el clima habitable en la Tierra, pero la actividad humana ha aumentado la concentración de estos gases en la atmósfera, lo que ha llevado a un incremento en el efecto invernadero y al calentamiento global.

Por otro lado, la capa de ozono se encuentra en la estratosfera, una región de la atmósfera ubicada aproximadamente a 10-50 kilómetros sobre la superficie terrestre. La capa de ozono está compuesta por moléculas de ozono (O3) y juega un papel crucial en la protección de la vida en la Tierra al absorber la mayor parte de la radiación ultravioleta del Sol. Esta radiación ultravioleta es dañina para los organismos vivos, ya que puede causar mutaciones genéticas y aumentar el riesgo de cáncer de piel.

En resumen, mientras que el efecto invernadero se refiere al calentamiento de la Tierra debido a la acumulación de ciertos gases en la atmósfera, la capa de ozono es una región especializada de la atmósfera que protege contra la radiación ultravioleta. Sin embargo, algunos de los gases responsables del efecto invernadero también pueden dañar la capa de ozono, lo que representa un desafío adicional para la salud del planeta. Es importante abordar ambos problemas mediante la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y la eliminación de sustancias que agotan la capa de ozono, con el fin de preservar la habitabilidad de nuestro planeta.

Te compartimos este vídeo de nuestro canal de Youtube relacionado, que puede resultar de tu interés.

https://youtu.be/R9eberCRUys

Ensamble de Ideas – Copyright MMXXIV

Tales de Mileto, el 1º filósofo natural

Tales de Mileto, el primer filósofo natural.

Todos nos hemos detenido alguna vez -incluso sin darnos cuenta- a pensar sobre la naturaleza. Preguntar porqués, buscar razones para algo por pura curiosidad. No estarías leyendo este artículo si no fuera porque eres curioso. Un día alguien se pregunto: “¿Por qué suceden los terremotos?”. Esta pregunta se la hizo un comerciante de aceitunas hace 2600 años.

Tales de mileto, filósofo natural.
Tales de Mileto (620 a. C.-. 546 a. C.).

En el siglo VI a.C., Mileto creaba una nueva cosmología, una nueva forma de entender el mundo.
Por ejemplo, creía que la Tierra se asemeja a una bolsa que flotaba en un gigantesco océano (a la luz de los conocimientos modernos, esto te sonará extraño) y que sus aguas están usualmente quietas; pero, muy de vez en cuando, se agitan. Cuando esto último sucede, estamos en presencia de un terremoto.

A pesar de que Tales de Mileto es más conocido por un famoso teorema que se estudia en matemáticas, se le atribuye el título de primer filósofo natural.

El concepto de átomo, según Tales de Mileto.

En los tiempos de Tales de Mileto, surgió por primera vez la idea del átomo: pensaban que la materia era discontinua, que debería existir un límite en el que la materia ya no pueda dividirse en partes cada vez más pequeñas en el caso de que uno separase un cuerpo a la mitad una y otra y otra vez. Creyeron que existían átomos particulares que ya no podían dividirse más. De hecho, la palabra “átomo” surge de las palabras griegas “a” (que significa “sin”) y “tomos” (“partes”); es decir, “sin partes”).

Pensaban que el universo era infinito y que únicamente existía materia y vacío. Sin poder comprobar experimentalmente la existencia de los átomos, no estaban muy alejados de los conocimientos que tenemos hoy en día, miles de años después.
A los filósofos que creían en todo esto se los llamó “atomistas griegos”, en el siglo V, a.C.

Mesografía Sugerida

En el portal fundacionaquae.org, se trata sobre la concepción del universo de Tales de Mileto, disponible en: https://www.fundacionaquae.org/wiki-aquae/el-agua-principio-de-todas-las-cosas-que-existen-tales-de-mileto/