IMANES: Los distintos tipos explicados

tipos de imanes

Los imanes son materiales capaces de atraer o repeler otros materiales llamados ferromagnéticos (o bien, otros imanes) conocidos desde tiempos antiguos. Adentrémosnos en su historia y los tipos de imanes que existen.

En la Antigüedad, se encontraba un mineral que tenía la propiedad de atraer el hierro, como si fuese por arte de “magia”. Como era muy abundante en la ciudad del Asia Menor llamada Magnesia, la roca recibió el nombre de magnetita. Hoy en día podemos hallarla también en grandes cantidades en las arenas de playas ubicadas en California, Nueva Zelanda, Perú, México, Noruega, Alemania y algunos estados de EEUU. La magnetita es un claro ejemplo de imán natural, un imán que está presente en la naturaleza que presentan la curiosa propiedad descripta. Existen también otros cuerpos que son imanes naturales. Sin embargo,  algunas sustancias como el hierro, el cobalto y el níquel pueden magnetizarse artificialmente, siendo llamados, entonces, imanes artificiales.

Magnetita.
Magnetita.

Un imán produce a su alrededor un campo magnético que se manifiesta cuando se colocan cuerpos que pueden magnetizarse, como el hierro. Todos los imanes tienen dos regiones donde su atracción es más intensa: los llamados polos magnéticos. En un imán con forma de dona, los polos están uno en cada cara. En un imán con forma de barra, están en los extremos. Los polos de diferentes imanes pueden atraerse o repelerse. de acuerdo con esto, se los clasifica en Polo Norte o Polo Sur. Los polos de signos iguales se repelen y los de signos diferentes se atraen.

 Imanes artificiales.
Imanes artificiales.

En este punto, estamos en condiciones de clasificar a los imanes según los tipos de materiales ferromagnéticos con los que se fabrican:

TIPOS DE IMANES

de alnico

Son llamados así porque están hechos de aluminio, níquel y cobalto. Presentan el mejor comportamiento frente a temperaturas elevadas. Son baratos, aunque poco poderosos.

de tierras raras

Son pequeños, de apariencia metálica, aunque suelen ser entre 6 y 10 veces más poderosos que otros tipos de imanes. No se desmagnetizan con facilidad, aunque son quebradizos y tienden a oxidarse fácilmente, por los que se los recubre con algún otro material que impida su oxidación. Los más comunes son los imanes compuestos por boro, hierro y neodimio. Ya que el neodimio es una tierra rara (es decir, es un lantánido), estos imanes reciben dicha denominación.

cerámicos

Son los imanes más comunes. Si bien son quebradizos, resisten la acción de sustancias químicas. Su apariencia es lisa y color gris oscuro. Se forman a partir de un polvo hecho de partículas muy pequeñas de material ferromagnético, como óxidos de hierro, que se juntan al calentarse a presión elevada, sin sobrepasar la temperatura de fusión. Soportan, entonces, temperaturas de 400°C a 200°C. Es común encontrarlos teniendo múltiples formas y tamaños, como en micrófonos, parlantes, heladeras, auriculares, etc.